domingo, 26 de febrero de 2012

Diálogo 6.6

Resulta muy difícil entenderse con las palabras, ¿verdad? Es decir, intentas expresarte lo más claramente posible y estoy segura de que, desde tu punto de vista, es difícil. Sé que el lenguaje se queda escaso para todo el mundo pero es que llega un momento en que una misma se da cuenta de lo escaso que resulta.

Sí, muchos de los personajes que asisten a las reuniones son gente extremadamente aguda. Por eso, este mensaje tiene que ser lo más preciso posible. Divagar sobre “la verdad” y “la iluminación” ya no “cuela” hoy en día.

En cierto modo, es como si ya supiéramos demasiado. ¿Entiendes lo que te quiero decir? Es como si ya estuviera todo dicho. Hace años, todo esto resultaba novedoso pero, ahora, es como si no quedase nada que decir. ¡Es que no se puede explicar con más claridad!

Ya.

¡Ahora buscamos “lo más clarísimo”! ¡Qué barbaridad!

Es la naturaleza del juego de la búsqueda en la representación teatral de la vida: siempre se pasa por alto lo más sencillo y evidente para intentar encontrar algo más. Aquí hablamos de algo muy sencillo pero con una terminología muy precisa.

Exacto. Esta búsqueda de algo más no tiene fin. En Estados Unidos, se inventan neologismos con expresiones como: “They´re really laser” o “They´re really crisp”.
(Jerga norteamericana sin traducción al castellano. Equivaldría a decir: “Son un láser” o “Son cortantes”. N del T).

(Riéndose.) ¿De verdad? Nunca había oído esas expresiones.